Desde 2018 la comunidad digital de aprendizaje de la Maestría en Pensamiento Crítico y Hermenéutica (MPCH) celebra un coloquio anual, el cual es ya una tradición que cultivamos con entusiasmo y que refleja el espíritu que anima a nuestro posgrado.

La MPCH surgió por una iniciativa de un grupo de profesores de la Unidad Académica de Filosofía de la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ), interesados en establecer puentes de colaboración entre filósofos formados en dos tradiciones distintas, a las que precisamente aludimos con las amplias y ciertamente no del todo exactas etiquetas de “pensamiento crítico” y “hermenéutica”, que también se asocian con las así llamadas “filosofía analítica” y “filosofía continental”, respectivamente. Frecuentemente se las concibe como escuelas filosóficas enfrentadas o, al menos, como líneas paralelas que nunca llegan realmente a tocarse. Estamos convencidos de que esto no tendría por qué ser así y que el diálogo entre quienes cultivamos uno u otro enfoque metodológico sobre la filosofía no sólo enriquece y le da vitalidad a nuestro pensamiento, sino que puede ser significativo para profesionistas de diversas formaciones y que se desempeñan en ámbitos sociolaborales distintos, como es el caso de nuestra estupenda y diversa comunidad de estudiantes de la MPCH.

Los coloquios Diálogos entre pensamiento crítico y hermenéutica son expresión de nuestra voluntad de reflexionar juntos, de utilizar herramientas filosóficas de análisis e interpretación que nos ayuden a entender y hacer frente a nuestro mundo y sus problemas. Como parte de estos coloquios tenemos siempre dos conferencistas externos al programa y a la UAZ, uno afín al pensamiento crítico y otro a la hermenéutica, así como mesas de diálogo integradas fundamentalmente por estudiantes y profesores de la MPCH.

El formato de las mesas de diálogo es peculiar porque, en el ánimo de establecer realmente una conversación y no limitarnos a leer ponencias, elegimos cada año un tema que como comunidad nos interesa examinar y que da nombre a esa edición particular del coloquio, disponiendo cada participante de seis minutos para analizar o problematizar algún aspecto relativo al tema que nos convoca. Después de las intervenciones de los integrantes de cada mesa se abre una ronda de diálogo entre ellos y, posteriormente, con todos los asistentes al coloquio. Las ediciones IV y V del Coloquio fueron organizadas por los estudiantes del penúltimo semestre de la MPCH quienes determinaron el tema que fue el eje de las conferencias y las mesas de diálogo. El VI coloquio fue organizado por una comisión integrada por docentes y estudiantes del programa. Ellas y ellos propusieron el tema convocante y diseñaron todo el coloquio.

¡Larga y buena vida a nuestra comunidad de diálogo!